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Lastres
Declarado Conjunto Histórico, el pueblo de Lastres debe ser destacado por su
configuración y adaptación al tipo de terreno que le confiere una belleza
ampliamente reconocida. Sus calles empinadas nos muestran interesantes palacios,
casonas blasonadas, iglesias, fuentes y capillas de carácter popular.
Iglesia de Santa María de Sábada. Declarada Monumento Histórico Artístico.
Data del siglo XVIII. (1757). Fue proyectada por los renombrados arquitectos
Manuel Reguera y Joaquín Vigil. Se estructura en planta de cruz latina.
Destacan dos retablos de los hermanos Agustín y Miguel López Acevedo y la
imagen renacentista del Crucificado tallado en madera y dotado de gran
expresividad. Ofrece al exterior una gran torre campanario.
Torre del Reloj. Construida en el siglo XVIII, consta de cuatro pisos, se
trata de uno de los edificios más emblemáticos de Lastres. La torre muestra
una ventanita en arco conopial a la altura del segundo piso que sugiere la
existencia de un edificio anterior posiblemente del siglo XV que cumpliese la
función de control del puerto.
Capilla de San Roque. Situada en un bello lugar, alberga un pequeño
retablo barroco que data según la inscripción de 1619.
Ermita de San José. Edificada en el siglo XVI a expensas de los
marineros de la villa. Con retablo de Luis Fernández de la Vega,
correspondiente al último tercio del siglo XVII.
Capilla del Buen Suceso. XVI. El elemento más destacable es el retablo
barroco policromado, obra de Luis Fernández de la Vega.
Palacio de los Victorero. Se sitúa en la calle Fontana y es una de las típicas
construcciones del siglo XVIII. En él se combinan elementos propios de las
construcciones rurales, como los cortafuegos y la buhardilla del ático, con
otros que le confieren apariencia señorial.
Palacio urbano de la Fontana, de comienzos del siglo XVIII. Con fachada típica
del palacio barroco urbano.
Palacio urbano de los Robledo. Su fachada con balcones y escudo en su
tramo central, se incluye plenamente en los esquemas barrocos del último tercio
del siglo XVIII.
El solar de la familia Vasco se alza en el barrio llamado de San Pedro.
Es una construcción de típica y de airosa planta, sus armas se mantienen en
perfecto estado, luciendo el magnífico escudo de preciosa labra.
Casa de Pedro Suapérez, de finales del siglo XVIII. En este noble
edificio se mantiene el estilo de casa popular.
A las casas descritas podemos añadir la Casa de los Colunga, cuyas armas sirven
de heráldica enseña al Concejo. Como la casi totalidad de las mencionadas,
presenta tres plantas en la fachada principal y sólo una en la posterior, a
consecuencia de hallarse adaptada al empinado terreno.
Fuente de la Regallina (1784), fuente de época neoclásica atribuida a Manuel
Reguera. La fuente de dos caños está fechada en la cartela ovalada que se sitúa
sobre el tímpano.
Grupo de casas de los siglos XVI, XVII y XVIII, con típicas balconadas y
ventanas de corredores, están diseminadas por todo el pueblo. Destacan por su
tipismo las del barrio "La Fontana", las de "La Calle Real"
y la del "Piquero".
Cruceiro, junto a la entrada de la Iglesia de Sta. María de Sábada. Se conoce
con el nombre de crucero la cruz de piedra con imágenes que solía levantarse
en las encrucijadas de los caminos. En Asturias prevaleció esta costumbre
durante los siglos XVII y XVIII.
Fuente: ayuntamiento de Colunga
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